Cruzan por debajo de carreteras, vías férreas, ríos o lagos: tuberías a presión que transportan diferentes medios bajo estos "obstáculos". Estas tuberías a presión, se caracterizan a menudo por tener gran longitud con forma de sifón, donde suele haber codos integrados en su trayectoria. Además, sólo son accesibles de forma limitada, por ejemplo desde las orillas de una masa de agua o junto a la vía. Muchos métodos de rehabilitación sin zanja alcanzan aquí sus límites y una nueva conducción requiere mucho tiempo, dinero, y suele ir asociada a problemas geotécnicos e hidrogeológicos, así como a riesgos relativos a su construcción.
Ventajas de Primus Line® Rehab
Primus Line® Rehab, la tecnología para la rehabilitación sin zanja de tuberías a presión es a la vez resistente y flexible. ¿Por qué? Estas propiedades son el resultado de la estructura multicapa del liner en combinación con los conectores especialmente desarrollados.
El liner consta de tres capas. La capa interior está adaptada al medio que se va a transportar: está fabricada en polietileno (PE) o en poliuretano termoplástico (TPU) con alta resistencia química, alta resistencia a la abrasión y a la corrosión. La capa intermedia es un tejido Kevlar® sin costuras. Absorbe totalmente la presión de operación y es hasta diez veces más resistente que el acero con el mismo peso. Esta capa en particular proporciona la estabilidad necesaria, pero también la flexibilidad requerida para pasar por codos. La capa exterior de Primus Line® Rehab de polietileno (PE) protege el liner de la abrasión durante la inserción y la operación.
Las longitudes de inserción de hasta 2.500 metros, una capacidad para atravesar codos de hasta 90 grados (dependiendo de la aplicación) y el bajo uso de maquinaria durante su instalación, hacen que la rehabilitación de tuberías con Primus Line® Rehab sea rápida y sencilla. Esto hace que el sistema sea especialmente adecuado para entornos con exigentes requisitos geográficos, económicos, arquitectónicos o ecológicos. Por ejemplo, para conducciones en cruces.
Ya sea bajo ríos, lagos, vías de ferrocarril o autopistas, la rehabilitación de cruces con Primus Line® Rehab requiere un espacio mínimo, lo que reduce significativamente la obra y, por lo tanto, el impacto en el área circundante. Para el transporte, la tubería flexible se pliega en forma de U y se enrolla en carretes especiales, para posteriormente insertarse mediante un cabrestante a una velocidad de hasta diez metros por minuto. Dependiendo del diámetro, un solo carrete puede contener hasta 4.000 metros de liner, que pueden cargarse eficazmente en un solo camión. Esto minimiza tanto los costes logísticos como el impacto medioambiental asociado al transporte.
Otro aspecto positivo: la rehabilitación con Primus Line® Rehab prolonga la vida útil de la conducción en al menos otros 50 años.
Primus Line® Rehab ya se ha utilizado en repetidas ocasiones para la rehabilitación de conducciones en cruces. Tres ejemplos de Alemania, República Checa y Canadá ilustran las diferentes aplicaciones para esta tecnología: